Calidad

La Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa (ABRA) ha presentado un nuevo proyecto que busca la diferenciación de los vinos alaveses. La estrategia planteada se centra en la letra ‘A’ como símbolo de calidad y singularidad.

Este nuevo emblema representa no solo el origen geográfico, «sino también valores intrínsecos al producto, como la tradición, el esfuerzo y la calidad del vino alavés», han indicado desde esta entidad. La ‘A’ también hace referencia a términos como Ardoa (vino en euskera), Añada, Aroma, Acidez y Afrutado, características que destacan la singularidad de los vinos de la región.

La ‘A’ no es solo un símbolo visual, «sino un estandarte que refleja el compromiso de los viticultores alaveses con su tierra, su tradición y la excelencia en la producción». Así, cada botella con este distintivo «será sinónimo de 100% vino, 100% alavés».

Esta ‘A’ se encontrará en forma de pegatina que se colocará en las botellas de vino alavés y estará presente en las próximas añadas como parte de la etiqueta, garantizando a los consumidores que se trata de vino 100% alavés. ABRA ha aprovechado para hacer un llamamiento a la unión del sector, invitando a nuevos socios y bodegas a sumarse al proyecto.

El objetivo de esta campaña, que se lanzará en las principales capitales vascas como Donostia, Bilbao y Gasteiz, «es educar al consumidor sobre las cualidades que diferencian a los vinos alaveses, mientras se refuerza el legado y la identidad del sector vitivinícola de Álava». Además, «se busca una mayor colaboración entre los pequeños productores y las instituciones para asegurar la supervivencia y proyección del vino local en el mercado global».
https://riojalavesa.com/

Leer más

La presidenta del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (Ifapa), Marta Bosquet, y el delegado territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural en Cádiz, Francisco José Moreno, han presidido en el centro Ifapa Rancho de la Merced (Jerez de la Frontera, Cádiz) la jornada de presentación del proyecto Ecovid, para mejorar la calidad de la uva y el vino, la salud del suelo y reducir el uso de biocidas en el viñedo.

«El sector del vino tiene muchos retos por delante como la escasez hídrica, los bajos rendimientos o las exigencias ambientales, pero la investigación es la mejor manera de asegurar su rentabilidad y sostenibilidad», ha asegurado Bosquet

Por su parte, Moreno ha defendido que «hay que seguir conjugando investigación e innovación con la tradición en el sector vitivinícola, una actividad con mucha importancia en la provincia de Cádiz y con mucho arraigo en el territorio».

En concreto, Ecovid, coordinado por la investigadora del Ifapa, Belén Puertas, busca «avanzar hacia una vitivinicultura más sostenible económica y medioambientalmente disminuyendo la aplicación de fitoquímicos, mejorando las propiedades y microbiota del suelo y aprovechando los subproductos de este sector». Con ello «se pretende poner en valor los vinos blancos y tintos ecológicos de calidad en la provincia de Cádiz».

Así, además de minimizar el uso de químicos y la alteración del suelo, en este proyecto «se va a trabajar también en otros ámbitos de la agricultura regenerativa como maximizar la biodiversidad de plantas y animales, promover el uso de cubiertas vegetales o la adaptación de la producción al medio local». Con este objetivo se van a evaluar, por una parte, la eficacia de las cubiertas vegetales en combinación con otras prácticas sostenibles como la siega natural por ganado ovino. Por otro lado, también se va a estudiar la eficiencia de extractos del alga asiática invasora Rugulopterix okamurae como biofertilizante y bioestimulante en la vid para contribuir al desarrollo de una viticultura circular.

En este sentido, «las algas han demostrado ser uno de los recursos marinos con mayor potencial como agentes protectores de las plantas, lo que representa un enfoque alternativo respetuoso con el medio ambiente para la producción sostenible de vino».

El equipo de investigación participante en este proyecto, que está cofinanciado con Fondos Europeos y cuyos trabajos se extenderán hasta 2026, «acaba de demostrar la capacidad bioestimulante del alga asiática en plantas en invernadero y, por tanto, se va a profundizar en esta línea para su aplicación en viñedos y contribuir así a la bioeconomía azul».

Leer más

La investigadora de CICYTEX, Nieves Lavado Rodas, ha recibido el premio a la mejor tesis doctoral sobre relaciones hídricas en planta a mediados de febrero en el VI Simposio Internacional Hispano–Portugués de Relaciones Hídricas en Plantas, celebrado en Zaragoza. El trabajo de la investigadora extremeña se titula: ‘Estudio del efecto a corto y medio plazo de la técnica del forzado de yemas sobre la productividad y la calidad de la vendimia del viñedo Tempranillo en Extremadura’. El ‘forzado de yemas’ «permite obtener, mediante la poda, un nuevo rebrote vegetativo en el mismo ciclo del cultivo para conseguir una maduración de la uva más tardía, coincidiendo con temperaturas más suaves».

El "forzado de yemas" permite obtener, mediante la poda, un nuevo rebrote vegetativo en el mismo ciclo del cultivo para conseguir una maduración de la uva más tardía, coincidiendo con temperaturas más suaves.

Lavado ha recordado que una de las limitaciones del viñedo en zonas cálidas de España «es la pérdida de calidad de los vinos debido a las altas temperaturas durante el proceso de maduración de la uva». El incremento de temperatura «provoca un mayor grado alcohólico y una disminución de la acidez y el color, componentes importantes en la uva y el vino». Por ello, una solución puede ser «retrasar el proceso de maduración para conseguir adaptar los viñedos actuales al contexto del cambio climático».

Esta investigación se ha realizado en CICYTEX en un viñedo experimental de cv. Tempranillo durante tres años consecutivos, centrándose en los efectos a corto y medio plazo que la aplicación del ‘forzado de yemas’ tiene en el viñedo y en la calidad de las uvas, y su combinación con la aplicación de un riego deficitario controlado. Además, «era importante determinar el momento más adecuado para aplicar esta técnica».

Entre las conclusiones destaca que el ‘forzado de yemas’ es una técnica capaz retrasar la maduración de las uvas situando las vendimias entre mediados de septiembre y mediados de octubre, según la fecha de aplicación. Con este retraso «se consigue aumentar la acidez total y el contenido en antocianos en las uvas y en los vinos, compuestos de interés por su valor enológico». La aplicación del ‘forzado de yemas’ «no supone un desgaste en el nivel de reservas de la planta, aunque si modifica la distribución de biomasa total incluso al dejar de aplicarlo».

Nieves Lavado defendió su tesis doctoral el año pasado en la Universidad de Extremadura con la calificación de ‘Cum Laude’. Este trabajo ha sido dirigido en CICYTEX por la responsable del área de Agronomía de Cultivos Leñosos y Hortícolas, Henar Prieto Losada; el investigador, especializado en Viticultura, David Uriarte Hernández, y la responsable del área de Enología, Esperanza Valdés Sánchez. Estos trabajos se enmarcan en el proyecto Prácticas agronómicas innovadoras para mejora de la calidad de los vinos en zonas cálidas frente al cambio climático, financiado por INIA (Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria).

Leer más

El equipo investigador del CRAG liderado por David Caparrós-Ruiz, jefe del grupo de Bioingeniería de la biomasa lignocelulósica, ha participado en el proyecto Cork2Wine, coordinado por la empresa Francisco Oller SA, que tiene como objetivo determinar el origen del TCA (‘sabor a corcho’) y explorar soluciones para afrontar esta problemática que tanto afecta a la industria corchera y a la vinícola.

El CRAG ha analizado muestras de alcornoques de Cerdeña (Italia) y de Girona (España), dos zonas que presentan niveles diferentes de TCA en el corcho. La investigación ha consistido en «comparar la actividad de los genes de cada población, secuenciando y comparando las moléculas de ARN de sus células, a través de herramientas de transcriptómica».

Estos experimentos, seguidos de estudios bioinformáticos, «han permitido determinar qué rutas metabólicas son más activas en los alcornoques de cada región y se ha elaborado un listado de metabolitos de carácter fenólico que están presentes en diferente abundancia en las dos poblaciones de alcornoques».

Caparrós-Ruiz ha señalado que «la obtención de este listado de compuestos es el primer paso para conocer la ruta metabólica completa de producción del TCA, y supone un paso imprescindible para buscar soluciones a esta problemática».

 

Identificación de compuestos precursores

Aunque el TCA se encuentra en el corcho, en su producción hay implicados microorganismos, «los cuales utilizarían los compuestos fenólicos de los alcornoques identificados en este proyecto como precursores para la generación de TCA». Así pues, la identificación de estos compuestos precursores «podría utilizarse para generar nuevas herramientas biotecnológicas encaminadas a reducir, o incluso eliminar, la presencia de este compuesto en el corcho».

Por su parte, Jordi Roselló, responsable de I+D+i de Francisco Oller SA, ha manifestado que «las empresas del corcho tenemos una gran voluntad de investigar y estamos muy contentos de esta colaboración con el CRAG».

 

Cork2Wine es un consorcio que ha agrupado a diferentes agentes y entidades nacionales del sector del corcho, entre ellas varias empresas, bodegas, explotaciones de alcornoques, una empresa del sector químico y diversos grupos de investigación. El proyecto ha durado cuatro años (de 2019 a 2023) y ha contado con un presupuesto de casi 5 millones de euros financiados por el CDTI Innovación y, en parte, con fondos FEDER de la Unión Europea, en el marco del Programa Estratégico CIEN. El mismo ha servido de punto de partida de esta colaboración público-privada, que ahora tiene continuación en un nuevo proyecto, concedido en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia con los Next Generation.

Cork2Wine «es un claro ejemplo de cómo las colaboraciones público-privadas pueden vehicular el impacto de la investigación fundamental en la ciudadanía, de modo que los conocimientos generados en el sistema de investigación se traduzcan en beneficios para la sociedad».

Leer más

 

 

 

 

 

 

 

La recién constituida Asociación para la Promoción de la Cereza de Milagro ha presentado la nueva marca colectivaCereza de Milagro’ que es susceptible de pertenecer a partir del año próximo a Reyno Gourmet, marca que protege los productos agroalimentarios de calidad diferenciada de Navarra. Durante su intervención, el presidente de la asociación, Íñigo Lorente, ha subrayado la vinculación existente entre este producto y su zona productora. «Se adscribe a 11 municipios de gran tradición en su cultivo y de condiciones agroclimáticas similares e idóneas para su producción. Todos los municipios están ubicados en las vegas del Río Ebro y sus afluentes lo que le confiere unas características que hacen tan especial y valorada a la ‘Cereza de Milagro’», ha indicado Lorente.

Por su parte, la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, Itziar Gómez, ha destacado la importancia de este paso para este producto tradicional. Así, ha señalado que «la presentación de la marca colectiva es un hito para este producto con total vinculación con Navarra y su futura incorporación a Reyno Gourmet supondrá un reconocimiento estratégico para la ‘Cereza de Milagro’, que se convertirá en figura de calidad». Además, la consejera ha insistido en la importancia de consumir producto local, por lo que anima a los consumidores a que «compren ‘Cereza de Milagro’, porque así apoyan al producto local y de temporada de Navarra por todo lo que supone, pervivencia de nuestras zonas rurales, vertebración del territorio y apoyo a la economía local».

Por último, Natalia Bellostas, directora gerente de la sociedad pública INTIA, ha explicado que «además de adquirir un papel tractor en la creación de esta asociación, nuestra entidad se ha encargado de la tramitación para el registro de la marca ‘Cereza de Milagro’. Estamos estableciendo contactos con personas productoras de los otros diez municipios para que puedan hacer uso de la marca bajo un mismo procedimiento de control y certificación».

 

La Marca Colectiva ‘Cereza de Milagro’

Su proceso de creación comenzó en el año 2020 cuando el INTIA realizó diversos estudios sobre producciones singulares de Navarra y fue en 2021, con la colaboración del Ayuntamiento de Milagro, cuando se realizaron reuniones con las personas interesadas de esta localidad y el Departamento de Desarrollo Rural e INTIA. En ellas se gestaron, en primer lugar, la constitución de a la Asociación titular de la marca, y después se consensuo un reglamento de uso que establecía los requisitos a cumplir por el producto amparado. 

El ámbito de producción de la ‘Cereza de Milagro’, tal y como establece su reglamento, abarca once municipios: Milagro, Cárcar, Andosilla, San Adrián, Azagra, Funes, Cadreita, Valtierra, Castejón, Corella y Fitero. La cereza puede provenir de las todas las variedades cultivadas en regadío en la zona descrita para su consumo en fresco, debe ser recolectada con cuidado, de manera manual para proteger el producto y en el punto óptimo de madurez.

La ‘Cereza de Milagro’ ya está oficialmente inscrita en la Oficina Española de Patentes y Marcas desde mayo de este año y ahora se encuentra en el proceso de implementación y difusión. Para ello es necesario conseguir el mayor número de personas productoras asociadas para su comercialización bajo este distintivo. El potencial de la marca podría alcanzar a una superficie de unas 200 hectáreas, que podrían obtener 1 millón de kilogramos de estas cerezas. 

Leer más

La OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico) ha publicado el nuevo ‘Folleto Interpretativo de las normas de calidad de Plátano/Banana’, en el que ASPROCAN (Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias) ha trabajado, durante los tres últimos años, junto a la Dirección Territorial de Comercio y a la Subdirección General de Inspección, Certificación y Asistencia Técnica de Comercio Exterior, ambos pertenecientes al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

ASPROCAN, en colaboración con estas instituciones, ha sido la encargada de aportar a la OCDE la interpretación de la norma CODEX y la ilustración de cada uno de los apartados.

La finalidad de este folleto «es facilitar, de una forma ilustrativa la interpretación de las normas de calidad tanto por parte de los Servicios de Inspección oficiales de los distintos países, como por parte de los agentes comerciales: exportadores, importadores, clientes, y todos aquellos participantes en la cadena de suministro de este preciado producto». Por ello, este folleto «se considera un instrumento de referencia que permitirá resolver discrepancias entre los socios comerciales, en la comercialización de la fruta».

Al respecto, ASPROCAN ha señalado que la elaboración de dicho documento por parte del sector «tiene una gran importancia ya que ha situado al plátano de Canarias como referente en calidad, y ha hecho visibles, a nivel internacional, las peculiaridades del plátano de las islas, aclarando características de calidad que afectan al plátano y para las que la interpretación de la norma podría no estar clara para todos los actores de la cadena».

Ejemplo de ello puede ser la aceptación, desde el conocimiento del producto, de la posibilidad de categorizar como de categoría ‘extra’ un plátano con presencia de látex en su superficie, cuando en ocasiones la presencia de látex se había considerado ‘materia extraña’, de modo que se llegaba a considerar que el plátano que lo presentaba no cumplía con los requisitos mínimos para su comercialización. Otro elemento ha sido igualmente «la diferenciación de la coloración característica de los plátanos soleados con respecto a los plátanos maduros, permitiendo su comercialización, aunque presenten esta característica».

Esta labor técnica, por lo tanto, «tendrá implicaciones en materia económica y comercial, ayudando a mejorar la posición del plátano de Canarias a situarse en nuevos mercados».

Tras su publicación, este folleto sirve como referente de interpretación de la norma en todo el mundo, más allá de los países de la OCDE.

Leer más

La Conferencia Andaluza de Consejos Reguladores de Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas (CADO) han celebrado su Asamblea General en Dos Hermanas (Sevilla). En la misma se presentó a los asociados la nueva página web, así como los diferentes canales en redes sociales a través de los que la Conferencia, de la cual forman parte 32 sellos de calidad, gestionados por los 26 consejos reguladores, promoverá los sellos de calidad andaluces.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

A lo largo de la asamblea se repasaron los principales asuntos de interés para las indicaciones de calidad de los productos agroalimentarios de Andalucía, con especial atención a aspectos relacionados con la promoción. La cita contó con la presencia de la consejera de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, quien manifestó el compromiso de la Junta de Andalucía con la calidad diferenciada que representan las denominaciones de origen y las indicaciones geográficas protegidas. Fruto de esta colaboración con la consejería es la campaña de publicidad que por un importe de un millón de euros servirá para promocionar los alimentos andaluces con D.O.P. e IGP y que se lanzará en los próximos meses.

La asamblea sirvió igualmente para dar a conocer la página web y los diferentes canales en redes sociales, a través de los que, a partir de ahora, la CADO desarrollará una permanente actividad de dinamización informativa sobre el consumo de productos con sello de calidad. César Saldaña, presidente de la entidad, ha explicado que, «con estos medios digitales se inicia una nueva etapa en nuestro proyecto común, pues a partir de ahora dispondremos de un instrumento permanente de diálogo con la opinión pública, a través del que difundiremos no sólo las actividades de la Conferencia, sino también información sobre cada uno de nuestros miembros». 

La CADO es una asociación sin ánimo de lucro que aglutina de forma voluntaria a los consejos reguladores de las denominaciones de origen e indicaciones geográficas protegidas existentes en Andalucía.

 

 

Leer más

Investigadores de la Universidad de Barcelona (UB), con la colaboración de investigadores del Instituto de Investigación de Tecnología Agroalimentarias (IRTA), han desarrollado una herramienta que permite comprobar si un aceite de oliva virgen extra es o no de origen europeo, una información que es relevante porque la declaración de origen de aceite de oliva la regula la Unión Europea (UE).

La herramienta de autentificación geográfica, que se ha descrito en las revistas Food Chemistry y Food Control, se basa en el análisis de los hidrocarburos sesquiterpenos, unos compuestos orgánicos presentes de forma natural en las plantas, y que «tienen una composición u otra en función no solo de la planta, sino del clima y el medio y las condiciones en las que ha crecido», ha indicado Agustí Romero, investigador del IRTA. Por ese motivo, ha añadido que «pensamos que los hidrocarburos sesquiterpenos presentes en el aceite de oliva virgen extra podría ser buenos marcadores geográficos».

En relación con esto, la primera autora de los estudios, Beatriz Quintanilla–Casas, investigadora de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación, el Campus de Alimentación Torribera y el Instituto de Investigación en Nutrición y Seguridad Alimentaria (INSA) de la UB, ha manifestado que «la piedra angular de toda herramienta de autentificación eficiente es que se fomente en marcadores analíticos robustos». En el caso de la autentificación geográfica del aceite de oliva virgen, sus marcadores «tienen que depender mayormente de la variedad de olivo y su área de cultivo, sin que estén influidos de manera significativa por otros factores relacionados con el proceso de extracción o de conservación del aceite».

Según han explicado, una de las ventajas de los compuestos sesquiterpenos es «que, al tratarse de compuestos semivolátiles, pueden analizarse fácilmente mediante una técnica muy usada i al alcance de la mayoría de los laboratorios de control públicos y privados: la cromatografía de gases acoplada a una espectrometría de masas». El resultado es «un perfil cromatográfico que es específico para cada región geográfica que opera de forma similar al reconocimiento inequívoco de las personas mediante las huellas dactilares».

En este caso, permite identificar aquellos aceites que presenten una señal analítica muy distinta de las consideradas de referencia. El proceso para que un método analítico se transforme en una metodología oficial con validez legal «es lento y complejo», según los investigadores. En cuanto a la nueva técnica, «los primeros usuarios potenciales serían los laboratorios de inspección y control, las entidades de certificación y las grandes compañías comercializadoras del sector oleícola».

Así, podría convertirse en una nueva herramienta de cribado aplicable en los procesos de inspección y auditoría, con la finalidad de contribuir a garantizar que los productos que llegan al mercado sean auténticos y reducir las oportunidades de fraude comercial en el sector de la alimentación. Los trabajos se han llevado a cabo en el proyecto OLEUM (H2020 635690, 2016–2020) y el proyecto regional AUTENFOOD (Ris3CAT COMRDI15–1–0035–01, 2016–2018).

Leer más

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

13 bodegas han recibido el sello de Elaborador Integral: Agustí Torelló Mata, Alta Alella, Cava Avinyó, Vins Familia Ferrer, Can Suriol, Celler Carles Andreu, Cava Gatell, Giró del Gorner, Juvé & Camps, Parató Vinícola, Parés Baltà, Torné & Bel y Vins el Cep

 

La Pedrera–Casa Milà de Barcelona ha acogido una jornada profesional, conducida por Ruth Troyano, en la que se han presentado las nuevas tendencias de la Denominación de Origen (D.O.) Cava, que ha reunido a profesionales del sector –periodistas, sumilleres, bodegueros, compradores–.

El presidente de la D.O., Javier Pagés, ha abierto el acto con una ponencia donde ha analizado el presente y el futuro del cava y sus elaboradores. Lo ha hecho presentando en público el nuevo sello de Elaborador Integral, «una de las ambiciosas iniciativas de la exigente normativa de la que se ha dotado esta denominación con la nueva segmentación y zonificación».

El Consejo Regulador de la D.O. Cava distingue con este sello a aquellos productores que elaboran sus vinos al 100% en su propiedad (prensado y vinificación). De esta forma, «se certifica que toda la producción se lleva a cabo en la propiedad, sin comprar vinos ni botellas en rima o en punta a otros elaboradores, y que los cavas se comercializan bajo marcas que no se comparten con otros elaboradores de cava». Pagés ha insistido en la relevancia de este sello «a la hora de trasladar al consumidor una gran garantía de trazabilidad del producto», y se ha mostrado convencido de que «el sello de elaborador integral es para todos. Un control de producto desde el principio, la viña, hasta el final. Es un concepto muy claro de lo que se quiere hacer y muy cercano a la viña, al territorio y al producto para alcanzar cotas de la más alta de calidad y prestigio. La D.O. lleva tiempo avanzando en los principios de calidad y esta normativa lo que permite es ahondar en un discurso para el consumidor, para que conozca el origen del cava. Queremos añadir una narrativa al cava».

Un total de 13 bodegas han recibido el sello de Elaborador Integral: Agustí Torelló Mata, Alta Alella, Cava Avinyó, Vins Familia Ferrer, Can Suriol, Celler Carles Andreu, Cava Gatell, Giró del Gorner, Juvé & Camps, Parató Vinícola, Parés Baltà, Torné & Bel y Vins el Cep. «Seguro que hay más gente que se va a sumar, aunque también es cierto que es una filosofía que no todo el mundo puede o quiere seguir», ha apuntado Pagès, quien ha querido recalcar el esfuerzo que supone elaborar desde la viña hasta el final.

A continuación, la prestigiosa Master of Wine británica Sarah Jane Evans, escritora, periodista y copresidenta de los Decanter World Wine Awards, ha dirigido una cata con 5 cavas de alta gama de Vins El Cep (Claror 2014), Juvé & Camps (La Capella 2010), Suriol (Brut Nature 2018), Alta Alella (Mirgin Exeo 2016) y Parés Baltà (Blanca Cusiné 2013). Gran amante del cava y del vino español y gran comunicadora, Evans ha dicho que «el cava es placer, pero mucho más». Según ella, «para los consumidores ingleses la sostenibilidad es lo más importante». Ha explicado que «los consumidores perciben los detalles y la conexión con las bodegas y esto es lo que consigue el nuevo sello de Elaborador Integral. El llegar al consumidor a través de una familia, historia, viñedo, origen, método y tradición. Cuando el cava se vende y exporta a otro país, los sumilleres y tiendas buscan cosas diferentes. Siempre hay un lugar para cavas distintos y eso es lo que el cliente del mercado inglés busca: curiosidades, origen y territorio».

El periodista y sumiller Ramon Francàs ha explicado ‘¿Cómo crear una carta de Cavas excelentes?’. Así, ha detallado lo que hay que hacer y lo que es conveniente evitar, respondiendo preguntas como qué es lo que se debe tener en cuenta para elegir los cavas en una carta de vinos de un restaurante. Francás ha expuesto diversas cartas de restaurantes y ha lamentado que «no es fácil ver botellas de cava en los restaurantes. Quizás en sus cartas sí haya, pero no tanto en sus mesas». Y ha añadido que «no es lógico que el espumoso de calidad más exportado del mundo y el vino español más exportado no tenga un mejor trato y consumo en su cuna». En este sentido ha recordado que «el cava suma 320 millones de kilos de uvas, contribuyendo a mantener preciosos paisajes ancestrales de viñedos. De hecho, suma más de 38.000 hectáreas de viñas, en las que trabajan 6.800 viticultores (son muchas familias). Además, sus 370 bodegas asociadas están presentes en más de 100 países». Finalmente, Ramon Francàs se ha dirigido a los restauradores, sumilleres y jefes de compra para decirles que «no es superfluo, pues, que les pida que tengan más cavas en sus cartas, que difundan sus bondades entre sus clientes y que, en general, lo consumamos más. Deben pensar que pocos vinos en el mundo tienen tan alta versatilidad gastronómica como el Cava, como tampoco su excepcional relación calidad–precio».

Leer más

El aceite de oliva virgen español necesita mejores sistemas de catalogación y valoración que los vigentes o, al menos, otros que los complementen. Agricultores, productores, cooperativistas, envasadores y exportadores, es decir todos los eslabones de su cadena de valor, coinciden en que «la forma actual de aplicar la cata desestabiliza el mercado y daña su reputación».  Por esta razón, el sector oleícola «reclama medidas suplementarias como una cata oficial previa a su envasado, cuyos resultados tengan una vigencia legal de un año». De esta forma, se añadirían garantías a los consumidores y «se reduciría la inseguridad jurídica y la incertidumbre de un proceso tan subjetivo como el análisis organoléptico». Así lo asegura el informe ‘Los falsos mitos sobre el aceite de oliva virgen español’, elaborado por la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (ANIERAC) y la Asociación Española de la Industria y Comercio Exportador de Aceite de Oliva (ASOLIVA).

El documento pone de relieve que falsos mitos, «fomentados por un método de categorización intrínsecamente subjetivo y estudios periódicos desmesurados, enturbian la imagen de uno de los emblemas de la Marca España». El primero de ellos es la creencia de que en los lineales de los supermercados se encuentra en ocasiones aceite de oliva falso. «No existe fraude sino discrepancias de valoración subjetiva entre distintos paneles, aun siendo todos oficiales», se apunta en el informe, para añadir que «la catalogación del aceite de oliva (virgen o virgen extra) se efectúe teniendo en cuenta conjuntamente todas las pruebas realizadas, las organolépticas y las fisicoquímicas». Estas últimas, que se realizan con equipos de alta precisión, «confirman continuamente que nuestros aceites de oliva son auténticos y genuinos, no se mezclan con otros de inferior calidad y, consecuentemente, cumplen al cien por cien los requerimientos de pureza y calidad que exige la normativa europea vigente».   

También está extendida, «sin ninguna base real», la idea de que «los paneles de cata son infalibles». A pesar de ello, reiterados estudios ponen en evidencia que «son habituales los casos en los que una misma muestra presenta diferencias en la clasificación, en función del panel de cata que la valore». Hasta el punto de que «una misma muestra catada por el mismo panel oficial, pero en momentos distintos, puede ser clasificada de forma desigual».

Otra creencia falsa es la de que «no hay alternativas al panel de cata». Se está avanzado en metodologías científicas objetivas que acaben con estas incertidumbres o, cuanto menos, las palien. Estas propuestas «están orientadas a complementar y elevar el nivel técnico y la objetividad de los sistemas de clasificación de las categorías del aceite comercializado –y sobre todo del AOVE–». Pero mientras, el sector demanda a las administraciones una aplicación que ofrezca garantía jurídica a los operadores como el sometimiento a los aceites de oliva vírgenes a una cata previa antes de su envasado y comercialización y que, en caso de ser apta, tenga una validez de 12 meses. De esta manera se obtendría una doble mejora:

– Una garantía más sólida al consumidor que dispondría de aceites con procedencia de lotes catados por paneles oficiales en la distribución.

– Una mayor seguridad jurídica a los operadores de la cadena de suministro pues podrían garantizar las buenas prácticas y calidad de los aceites a la hora de ser envasados.

El aceite de oliva virgen «es uno de los productos alimentarios más regulados y controlados en el ámbito de la Unión Europea, como refuerza el hecho de que sea el único alimento del mundo en su categoría que está sometido a un procedimiento jurídico obligatorio adicional como el examen organoléptico, más conocido por el término cata, para clasificar sus diferentes escalas comerciales». Estas se conceden, agrega el informe, en base a un procedimiento subjetivo, «pues depende de la destreza y gustos de los catadores».  

«Esas desavenencias –indica el estudio de ANIERAC y ASOLIVApor muy exiguas que sean no son baladíes, ya que las administraciones las sancionan económicamente. Una incertidumbre generalizada que se agrava en España dado que las competencias en esta materia las ostentan las comunidades autónomas. Estas diferencias se dan, por tanto, desde la calificación de la infracción hasta el régimen de sanciones aplicable». A estos inconvenientes hay que añadir «el deterioro de la imagen del producto y el aumento de la desconfianza entre los consumidores». Para subrayar al respecto que «los criterios de cata se diseñan en los despachos pensando más en los técnicos que en el público objetivo».

 

Propuesta a la Administración
Ante todo ello, el sector ha propuesto a la Administración que se permita al operador que lo introduce en los canales de venta contar con un aval en su responsabilidad mediante «una cata oficial realizada al producto antes de su envasado, cuyos resultados deberían tener una vigencia legal de un año». Durante este tiempo «se practicarían controles periódicos para verificar la autenticidad del producto distribuido: que el aceite en el mercado sea el mismo que en su día se analizó». Así se mejoraría la calidad al tiempo que se reforzaría la seguridad jurídica. «Sería una solución temporal porque esta como cualquier otra cata adolecería de los mismos defectos», concluye el citado informe.

La búsqueda de un método científico de evaluación preciso también es una prioridad. La Organización Interprofesional del Aceite de Oliva Español, el Ministerio de Agricultura y las comunidades autónomas, especialmente la Junta de Andalucía, han impulsado durante los últimos seis años proyectos de investigación e innovación «con el objeto de desarrollar tratamientos de datos a partir de señales instrumentales que puedan proporcionar al panel test un plus de objetividad». En definitiva, se trata de perfilar una metodología científica y equilibrada –conocida como ‘nariz electrónica’– que complemente o sustituya la de los paneles–test.

Leer más

Publicidad

  

Newsletter

Suscríbete a nuestra Newsletter

Ejemplar gratuito


Entra en el Kiosco para accecer a tus suscripciones, descargar revistas en abierto, comprar ejemplares, ...

Publicaciones recomendadas

Colaboramos con: