El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha destacado en un debate en el Senado que la lucha eficaz contra la plaga del ‘cotonet’ de les Valls pasa por adoptar una estrategia integral a lo largo de todo el año. En su intervención, en respuesta a una interpelación del Grupo Popular, ha indicado que los diferentes tratamientos fitosanitarios empleados, entre ellos, el metil-clorpirifos, sustancia peligrosa para la salud humana, no han impedido la dispersión de la plaga, debida, sobre todo, al transporte entre parcelas afectadas.
Planas ha advertido, asimismo, sobre el riesgo que supondría una autorización excepcional del metil-clorpirifos, sustancia prohibida por la Unión Europea (UE), ya que cualquier mínimo residuo que pudiera detectarse conllevaría el rechazo de los productos españoles por parte de operadores y autoridades de los países de destino. De acuerdo con la legislación comunitaria, está prohibido comercializar productos que contengan residuos de esta sustancia. Por este motivo, el ministro ha señalado que si supiera que esa es la mejor solución la tomaría, «pero no la tomo por responsabilidad», ha sentenciado.
El ministro ha remarcado la necesidad de contar con un plan de lucha integral, puesto que el uso del metil-clorpirifos no ha resultado ser eficiente para evitar la propagación de esta plaga. El Delottococus aberiae, conocido como ‘cotonet’ de Les Valls, además de afectar a cítricos, provoca daños en caqui y níspero. Hasta ahora se ha detectado en la Comunidad Valenciana y, también, en la provincia de Tarragona, en Cataluña.
Uso de sustancias no tóxicas
Planas ha subrayado la necesidad de hacer frente a esta plaga mediante sustancias no tóxicas, a través de productos fitosanitarios alternativos, organismos de control biológico y métodos biotecnológicos de control poblacional mediante la feromona de la plaga. También ha hecho hincapié en la necesidad de no olvidar las medidas de bioseguridad, ya que es evidente que la plaga se ha transportado de unos lugares a otros.
Asimismo, ha explicado que esta plaga apareció en España hace doce años y que los diferentes tratamientos fitosanitarios empleados no han impedido su dispersión. Ante la eventualidad de su posible extensión fuera de estos territorios, en septiembre de 2020 el Comité Fitosanitario Nacional (órgano de coordinación nacional en materia de sanidad vegetal) puso en marcha un plan de acción para la lucha frente al ‘cotonet’, cuyas medidas deben ser aplicadas en todas las comunidades autónomas en las que se constate la presencia de esta plaga.
Además de las medidas sanitarias en cultivos, el plan incluye una estrategia de bioseguridad e higiene para las cajas y envases empleados en la recolección de la fruta con el fin de evitar así la dispersión del ‘cotonet’. También recoge medidas aplicables a la maquinaria y medios de transporte hasta las centrales de envasado o producción.
Respecto a la denegación de la autorización, por parte de la Unión Europea, del uso de metil-clorpirifos para combatir la plaga de ‘cotonet’, Planas ha puntualizado que la Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (EFSA, siglas en inglés) consideró que esta sustancia suponía un riesgo potencial grave para la salud de las personas, por lo que propuso su «no renovación». Dicha propuesta fue votada y aprobada por el Comité Permanente de la Cadena Alimentación y la sustancia fue cancelada. Ante esta situación, el ministerio ha estado trabajando, en coordinación con la Comunidad Valenciana, en métodos biológicos de lucha mediante la realización de ensayos que permitiesen la autorización del organismo de control biológico Anagyrus aberiae, un depredador natural cuyas sueltas comenzaron a realizarse a partir de septiembre de 2020. También se ha autorizado, de manera excepcional, el uso de feromonas para el control de la plaga.
Por último, el ministro ha destacado la importancia de observar las recomendaciones comunitarias en materia de sanidad vegetal para que los productos españoles sigan siendo un referente de seguridad y calidad, tanto a nivel europeo como mundial.
AVA-ASAJA denuncia falta de acción política
Por su parte, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) reacciona al debate en el Senado sobre la lucha contra el ‘cotonet’ denunciando «la falta absoluta de acción política por parte de todos los niveles para prevenir la llegada de esta plaga a la citricultura valenciana en 2009, para eliminarla en los pocos campos donde fue detectada y para ofrecer a los agricultores herramientas de control verdaderamente eficaces».
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, ha indicado que «el alcance tan catastrófico que este ‘cotonet’ procedente de importaciones citrícolas de Sudáfrica está provocando en nuestras cosechas es consecuencia de la incompetencia de las distintas administraciones y de su escandalosa negativa para atender debidamente las demandas que desde el sector agrario les hemos ido trasladando». Para matizar que «en este momento únicamente sería factible mantener la autorización, con carácter excepcional, del Clorpirifos y otras sustancias contra el ‘cotonet’ para el mercado nacional, pero si queremos enviar nuestros cítricos más allá de los Pirineos, destino donde exportamos más del 90% de la cosecha, debemos tener claro que en ningún otro país de la Unión Europea podrían detectarse residuos del Clorpirifos y similares porque rechazarían los pedidos. Por tanto, hay que medir muy bien las consecuencias».