La Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas, que representa a las denominaciones de origen (DD. OO.) del vino, reunió el 25 de noviembre en Madrid a europarlamentarias y europarlamentarios españoles de diferentes formaciones políticas, miembros de las dos Comisiones del Parlamento Europeo (PE) que más directamente trabajan sobre el sector del vino, la de Agricultura y Desarrollo Rural y la de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria. Todos ellos protagonizaron el encuentro ‘Las denominaciones de origen de vino ante las reformas de la política agroalimentaria de la UE’, organizado por CECRV, con el objetivo de que las DD. OO. y representantes políticos de nuestro país en el PE «pudieran intercambiar información, conocimiento y posición sobre las reformas europeas que más pueden condicionar la política vitivinícola de la Unión Europea en el corto y medio plazo». 
Junto a casi una veintena de denominaciones de origen de vino y los principales representantes de CECRV y de EFOW, la European Federation of Origin Wines, que representa a las indicaciones geográficas de vino ante las instituciones de la UE, participaron en el encuentro las europarlamentarios Dolors Monserrat (Grupo del Partido Popular Europeo), presidenta de la Comisión de Peticiones y miembro de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria de la Eurocámara; Adrián Vázquez Lázara (Grupo Renew Europe, Ciudadanos), presidente de la Comisión de Asuntos Jurídicos del PE; Eugenia Rodríguez Palop, (Grupo de La Izquierda, Podemos), vicepresidenta de la Comisión de Derechos de las Mujeres e Igualdad de Género y miembro de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo; Daniel Senderos, diputado (Grupo Socialista, PSOE), portavoz adjunto del PSOE en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación del Congreso de los Diputados, y Mazaly Aguilar (Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos, VOX), vicepresidenta de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural del Parlamento Europeo. 
En el encuentro se abordaron tres reformas europeas que van a afectar a la regulación de las Indicaciones Geográficas –II. GG.– (ya en tramitación), al etiquetado de los productos agroalimentarios y a la promoción de estos (estas dos últimas, a corto y medio plazo). 
CECRV y las denominaciones de origen expusieron y argumentaron su visión en torno a ellas, reclamando a los representantes políticos «la necesidad de que la reforma de la regulación de las indicaciones geográficas sirva para mejorar la actual regulación sobre la Organización Común de los Mercados Agrarios y no para multiplicar normas, con la creación, como pretende la Comisión Europea, de un nuevo reglamento de base sobre II. GG.». Asimismo, las DD. OO. «pidieron que no se deleguen a la EUIPO (Oficina de Propiedad Intelectual de la UE) funciones y responsabilidades en materia de procedimientos relativos a las indicaciones geográficas y a los pliegos de condiciones y evidenciaron el papel propio que las denominaciones de origen pueden jugar como palanca de cambio en materia de sostenibilidad medioambiental, económica y social». En materia de etiquetado, les manifestaron a los eurodiputados «la necesidad de respetar las actuales disposiciones vigentes que sobre etiquetado nutricional y de ingredientes recoge la OCM para el sector del vino, aprobadas con la reciente reforma de la PAC, defendiéndolas como un paso decidido del sector por aumentar el nivel de conocimiento del consumidor sobre el producto y seguir contribuyendo a reducir el consumo abusivo de alcohol, en cumplimiento de los objetivos fijados por la Comisión Europea para la próxima reforma del reglamento de información facilitada al consumidor». En relación a la promoción de productos agroalimentarios de la UE, las DD. OO. reivindicaron que «el sector del vino sea tratado igual que el resto de sectores agroalimentarios, sin discriminación ni, por supuesto, exclusión alguna, teniendo en cuenta el trabajo que operadores e indicaciones geográficas vienen realizando para ser referentes en sostenibilidad y para alinearse con las políticas de información al consumidor previstas por la Comisión Europea». 
 

Apoyo a las reivindicaciones

Por su parte, los europarlamentarios presentes trasladaron a las DD. OO. su apoyo a estas reivindicaciones, sin excepción, «por considerarlas comprensibles y razonables». Según ha indicado la CECRV, «todas y todos hicieron patente su visión sobre el vino como un sector dinámico, muy bien organizado y estructurado y a la vanguardia a la hora de afrontar de forma rigurosa y desde el autodiagnóstico debates y cuestiones planteados por las instituciones como los indicados». Además, resaltaron las particularidades del trabajo que llevan a cabo en las comisiones a las que pertenecen, particularmente en la de Agricultura, manifestando que el consenso entre diversas formaciones políticas está presente cuando de aspectos vitivinícolas se trata entre los representantes españoles en el PE, compartiendo la visión de que es un sector muy transversal y que aporta mucho a la agricultura europea y a la de nuestro país. 
Ante el riesgo de debilitamiento significativo que para la política vitivinícola de la Unión Europea suponen, a juicio de las DD. OO., los planteamientos de partida de la CE en las tres reformas mencionadas, desde la CECRV se solicitó a todas las formaciones políticas «apoyo en el Parlamento Europeo para que la UE siga teniendo una política vitivinícola fuerte y específica, que ha sido la garante de que el sector del vino europeo, con las DD. OO. como motor, haya sido, hasta el momento, una historia de éxito».